El Tren Popular de la Cultura fue la iniciativa estrella del gobierno del Presidente chileno Salvador Allende, para acercar la cultura a personas que no tenían acceso a ella. Para esto, en febrero de 1971 Allende organizó un tren rumbo al sur de Chile con 60 artistas durante 40 días, para hacer representaciones artísticas en pueblos apartados. La iniciativa, era parte de la medida número 40 de su programa de gobierno, que tenía como fin último la creación del Instituto Nacional de las Artes y la Cultura y de escuelas de arte en todas las provincias del país.